La prostatitis es una inflamación de la próstata, la glándula que produce la porción líquida del semen. Ésta es la enfermedad más común del sistema reproductivo en hombres maduros. La prostatitis bacteriana aguda es una enfermedad relativamente rara, su frecuencia no supera el tres por ciento de todos los procesos inflamatorios en la próstata.
Causas de la prostatitis aguda
La principal causa de la prostatitis aguda en los hombres son las bacterias, algunas de las cuales forman parte de la microbiota normal del cuerpo, es decir, viven constantemente en la piel, en los intestinos. Una vez en los tejidos y conductos de la próstata, provocan una inflamación aguda.
La infección puede ingresar a la próstata de dos maneras:
- canalicular ascendente: bacterias con uretritis, cistitis, después de que la cistoscopia ingrese a la próstata.
- hematógenos: los microbios ingresan a la glándula prostática con flujo sanguíneo de focos distantes de infección aguda y crónica: forúnculos, carbuncos, sinusitis, dientes enfermos y amígdalas.
Además de las bacterias, el estancamiento de la secreción de la glándula prostática y el estancamiento de la sangre venosa, que se desarrollan durante la actividad sexual irregular con relaciones sexuales raras, con restricciones prolongadas de la movilidad, especialmente en una posición sentada y usando ropa interior ajustada, son importantes.
La glándula consta de dos secciones: los folículos, en los que se produce la secreción, y los conductos excretores, a través de los cuales la parte líquida del semen ingresa a la uretra. Dependiendo de qué parte de la próstata esté inflamada, existen diferentes formas de prostatitis aguda en los hombres, que se tratan con diferentes métodos.
Signos de prostatitis aguda
Los síntomas de la prostatitis aguda dependen de la forma y gravedad del proceso inflamatorio. Los médicos distinguen entre tres formas:
- catarral.Los principales síntomas son el trastorno de la micción. Los conductos excretores se inflaman, la próstata se agranda y bloquea la uretra, como resultado de lo cual la micción se prolonga, acompañada de dolor y sensación de ardor en la uretra. Hay impulsos nocturnos, el paciente sufre de insomnio.
- folicular.Con una mayor progresión del proceso, los tejidos de los folículos comienzan a supurar. Los trastornos urinarios se acompañan de dolor en el perineo, que se irradia al ano, la temperatura aumenta a 38 grados.
- parenquimatoso.Los folículos continúan enconándose, se forman una gran cantidad de pequeños abscesos. Dificultad para orinar, se vuelve muy dolorosa, aparece dolor durante el acto de defecar. La temperatura sube a cuarenta, en la ingle, el perineo, el sacro: dolores agudos.
Pruebas de diagnóstico
El urólogo realiza un diagnóstico basado en un estudio integral, que incluye:
- Examen rectal.El urólogo inserta un dedo en el ano del paciente y palpa la glándula, determina el aumento de volumen y dolor, y concluye que hay un proceso inflamatorio.
- Análisis de orina general.En el análisis de orina, se determinan leucocitos, sangre, bacterias y proteínas. Estos son indicadores inespecíficos de inflamación del tracto urinario; no pueden usarse para concluir sobre un sitio específico de inflamación.
- Análisis bacteriológico de orina.El cultivo de orina para esterilidad le permite aislar los microbios que causaron la inflamación, determinar su tipo, resistencia y sensibilidad a los antibióticos.
- Ecografía de próstata.El examen de ultrasonido muestra un cambio de tamaño, indica nodos, formaciones, abscesos.
- Resonancia magnética o tomografía computarizada de la pelvis.Se lleva a cabo en preparación para la cirugía o para la diferenciación con tumores de próstata.
- Análisis de sangre para PSA.El antígeno prostático específico es una proteína secretada por la próstata. Su contenido aumenta en enfermedades de la glándula prostática: prostatitis, adenoma y tumores malignos de la próstata. El análisis se realiza para el diagnóstico diferencial con tumores, ya que los valores de PSA en cáncer son mucho más elevados que en prostatitis.
Complicaciones de la prostatitis aguda
Si el tratamiento correcto de la prostatitis aguda no se inicia a tiempo, esto puede conducir al desarrollo de las siguientes complicaciones:
- Absceso de la próstata.Si la prostatitis no se trata, tarde o temprano pequeños abscesos se fusionan en uno grande, que se llama absceso. Esta complicación se trata solo con prontitud, abriendo la próstata y limpiando cuidadosamente el pus de allí.
- Inflamación del plexo venoso paraprostático.La inflamación de la próstata puede extenderse a las venas circundantes. La gran cantidad de bacterias que se liberan en el torrente sanguíneo conducirá a una respuesta inflamatoria sistémica, la sepsis, que puede ser fatal.
- Paraprostatitis.Ocurre cuando un absceso irrumpe en el tejido circundante de la próstata. Trate solo con prontitud.
- Transición a una forma crónica.La prostatitis aguda sin tratamiento se vuelve crónica, lo que requiere un curso de tratamiento que dura varios años. El cincuenta por ciento de los pacientes con prostatitis crónica desarrollan trastornos mentales que requieren corrección con antidepresivos y tranquilizantes.
Qué hacer con la prostatitis aguda
Un paciente con un ataque de prostatitis aguda necesita hospitalización urgente. El tratamiento de la prostatitis aguda debe realizarse en un hospital e incluye antibióticos, agentes antiinflamatorios y reconstituyentes.
La terapia antibacteriana incluye agentes de amplio espectro y se prescribe durante períodos prolongados, de quince a treinta días, hasta que las bacterias se destruyen por completo. Para la prostatitis aguda, los médicos suelen utilizar los siguientes antibióticos y fármacos antibacterianos:
- fluoroquinolonas- levofloxacina, ciprofloxacina;
- trimetoprima;
- doxiciclina;
- cefalosporinas- cefotaxima, ceftriaxona.
Además de los antibióticos para la prostatitis aguda, se utilizan los siguientes medicamentos:
- medicamentos antiinflamatorios no esteroides (diclofenaco): ayudan a aliviar el dolor;
- péptidos biorreguladores (extracto de próstata, vitaprost, prostatilen): se utilizan en forma de supositorios. La próstata no solo produce la parte líquida del semen, sino que también realiza una función reguladora al liberar hormonas. Los supositorios ayudan a compensar la falta de hormonas y evitan las complicaciones asociadas.
No se automedique, ¡es peligroso! No use remedios caseros como el masaje de próstata: las secreciones y el pus, una vez en la sangre, causan envenenamiento de la sangre, que puede ser fatal. Si encuentra signos de prostatitis aguda, llame inmediatamente a una ambulancia o consulte a un médico.
El sexo con prostatitis aguda está contraindicado. En primer lugar, el dolor severo en el perineo y el sacro, temperatura alta, no se dispone en absoluto a las relaciones sexuales. En segundo lugar, la pareja corre el riesgo de contraer una infección de transmisión sexual.
Prevención de la prostatitis aguda
La prostatitis aguda es mucho más fácil de prevenir que de curar. Basta con observar algunos puntos importantes:
- llevar a cabo una higiene personal minuciosa, tratar la cistitis y la uretritis a tiempo;
- tener relaciones sexuales con regularidad para evitar el estancamiento de la secreción de la próstata;
- evitar las enfermedades de transmisión sexual;
- trate forúnculos, carbuncos a tiempo, controle la salud de sus dientes;
- use ropa interior holgada de algodón;
- realice suficiente actividad física para evitar la estasis en las venas de la próstata.
El tratamiento de la prostatitis debe realizarse bajo la estricta supervisión de un médico. El especialista desarrolla un programa de examen, elabora un esquema de diagnóstico individual.
Es importante consultar a un médico ante la primera sospecha de patología. La falta de atención a los síntomas o la automedicación pueden complicar significativamente la situación. La asistencia médica oportuna y profesional ayudará a hacer frente a la enfermedad y a prevenir complicaciones.
Síntomas y causas de la prostatitis.
Como regla general, hablando sobre el tratamiento de la prostatitis, se refieren a la etapa crónica de la patología. Esto se debe al hecho de que la fase aguda dura solo unos días y, a menudo, no causa una gran preocupación para un hombre. Como resultado, el proceso inflamatorio se vuelve crónico y el tratamiento de la prostatitis se retrasa significativamente.
La prostatitis aguda se puede reconocer por los siguientes signos:
- dolor en el perineo y el escroto,
- calambres en la parte inferior del abdomen
- debilitamiento de la erección,
- falta de erección voluntaria por la mañana.
Estos síntomas pueden aparecer todos a la vez o de uno en uno. Después de unos días, desaparecen o disminuyen significativamente. Este es precisamente el peligro de la enfermedad. En ausencia de asistencia calificada, la prostatitis se vuelve crónica. Esta etapa se caracteriza por:
- aumento de la necesidad de orinar,
- una disminución en la cantidad de orina excretada,
- debilitamiento del chorro al orinar,
- disfunción eréctil,
- dolor en la pelvis pequeña, perineo.
Cualquiera de estos síntomas es motivo para consultar a un médico. En nuestra clínica, un urólogo en Leninsky determinará con precisión la causa de la enfermedad y prescribirá un tratamiento efectivo.
Identificar la etiología de la prostatitis es una de las tareas más importantes a la hora de elegir un curso terapéutico. Hay varias causas principales de la enfermedad:
- infecciones de transmisión sexual: clamidia, tricomoniasis, ureaplasmosis y otras,
- bacterias: ingresan a la glándula prostática a través de la uretra, con el flujo de sangre o linfa,
- hipotermia: causa inflamación de la próstata que, como en otros casos, se vuelve crónica rápidamente.
Todos los exámenes necesarios para identificar las causas y el tratamiento de la prostatitis se pueden realizar en nuestra clínica. El programa de exploración lo realiza el urólogo de forma individual.
Diagnóstico de la enfermedad
Entre los métodos obligatorios para diagnosticar la prostatitis se encuentran:
- análisis de orina general,
- examen microscópico de la secreción de la próstata,
- Ecografía de la glándula prostática.
De acuerdo con el cuadro clínico individual, el urólogo puede prescribir exámenes adicionales. Si sospecha de la naturaleza de transmisión sexual de la prostatitis, se recomienda hacerse la prueba en Leninsky Prospekt para enfermedades de transmisión sexual. Sobre la base de los resultados de un diagnóstico integral, el especialista elabora un régimen de tratamiento para la prostatitis.
Terapia compleja
El tratamiento de la prostatitis a menudo se lleva a cabo mediante métodos conservadores. La terapia con antibióticos es la base. Con la ayuda de antibióticos, se eliminan los patógenos, se elimina la inflamación de la próstata. Los medicamentos modernos penetran bien en el tejido de la glándula prostática y eliminan la causa principal de la patología. Además, el médico puede recetar alfabloqueantes, hormonas, relajantes musculares.
Otra técnica eficaz es el masaje de próstata. Restaura la permeabilidad de los conductos, mejora la circulación sanguínea en la próstata y aumenta su tono. Se usa con mayor frecuencia en el tratamiento de la prostatitis bacteriana, la presencia del síndrome de dolor pélvico.
La duración del curso depende del cuadro individual de la enfermedad. Es importante que el tratamiento de la prostatitis en la clínica no tenga como objetivo aliviar los síntomas, sino eliminar la causa principal de la patología. Este enfoque le permite deshacerse de una enfermedad crónica y prevenir recaídas.